Si eres como yo… seguro que ansias las vacaciones de verano casi tanto como las temes. Es tiempo de disfrute en familia, pero también de más carga física y mental. Principalmente porque los peques salen de sus rutinas, los días se alargan, las comidas se relajan… ¿y qué pasa con todo lo aprendido?
El verano es para relajarse y aprender de otra manera. Con menos normas. Pero eso no quita que busquemos momentos para crear nuevas rutinas (o recordar las rutinas de siempre), para relajarnos en casa, para crear vínculos… y ahí es donde las canciones infantiles pueden ayudar. No solo como forma de juego y vínculo afectivo, sino también para seguir trabajando, siempre desde el juego, en distintas áreas de su desarrollo y, sobre todo, reforzar el lenguaje con un juego libre de pantallas.
¿Lo has probado? Yo incorporo estos pequeños momentos de juego a diario, en los cambios de pañal, antes de ir al colegio, antes de la cena… ¡y nos funciona superbién! En nuestra app encontrarás tips de cómo jugar con cada canción. Atrévete a probarlo y me cuentas.